El desafío

A medida que el equipo del Hospital Universitario Inselspital de Berna, uno de los más grandes de Suiza, planificaba su mudanza al edificio Anna-Seiler-Haus, buscaban generar un espacio singular y diferencial para el disfrute de sus usuarios en el atrio principal. 

Para alcanzar este objetivo, a Studio Banana se le encomendó la tarea de diseñar una instalación artístico-espacial capaz de fascinar a los usuarios integrada sutilmente a este entorno hospitalario único. En colaboración con GWJ, IAAG, ASTOC, Archipel General Planner, MKT y Spy y el equipo de Inselspital, trabajamos en la creación de una instalación serena y armoniosa que conjuga e integra tiempo, espacio y tecnología respetando los requisitos físicos y funcionales del hospital

El resultado

Diseñado para encantar y mejorar el estado de ánimo de los visitantes, pacientes y personal médico, Loops conjuga arte y arquitectura en una innovadora instalación cinética que dialoga con el espacio y sus usuarios, al tiempo que complementa el entorno arquitectónico.

Como una danza, esta cautivadora estructura consta de 24 anillos que flotan suavemente a través de una coreografía perpetua en uno de los dos atrios del edificio siguiendo un diseño estético minimalista y no invasivo que ofrece una paleta infinita de formas inspiradas en la naturaleza.

Con una extensión de hasta 21 m de alto, 6 m de ancho y 8 m de largo y contrastando con la estructura ortogonal de la arquitectura a través de sus anillos de bordes suaves, Loops ofrece diferentes puntos de vista y perspectivas desde los 5 pisos del atrio, permitiendo muchas interpretaciones y percepciones diferentes a la vez para maravillar al espectador durante horas.

“El edificio junto con la instalación

ofrecen un entorno de relajación y dispersión,

pero también coraje y esperanza”.

Bruno Jung, Director general del proyecto
del nuevo edificio Anna-Seiler-Haus

Inspirar a través del arte, humanizar a través del diseño

Como Anna-Seiler-Haus conjuga múltiples grupos de usuarios, era clave integrar estas diversas perspectivas en el proceso creativo. Co-diseñando junto con los futuros usuarios, los arquitectos y los planificadores generales, llevamos a cabo una serie de talleres para definir la visión y el eje principal del proyecto: ofrecer una experiencia única capaz de encantar y distraer, pero también cautivar y sorprender a los empleados, pacientes y visitantes.

Tras una comprensión detallada de las dinámicas de los usuarios, los ritmos y movimientos diarios, nuestro equipo llevó a cabo la dirección creativa del proyecto, trabajando en estrecha colaboración con los especialistas técnicos de MKT Engineering, desde la concepción hasta la ejecución, incluyendo desde el desarrollo de los anillos y la programación de la coreografía hasta la supervisión de la fabricación e instalación.

Un sutil diálogo con el espacio

Inspirándose en los siempre cambiantes e imparables movimientos cíclicos de la naturaleza, los anillos aparentemente ingrávidos que conforman Loops dibujan constantemente trayectorias etéreas creando sofisticados patrones coreográficos. Esta danza se ve reforzada por una interacción de luz y velocidad.

Estéticamente comprensible y universalmente atractivo, el diseño de Loops permite muchas interpretaciones alternativas desde los cinco pisos del atrio, estimulando nuevas perspectivas y experiencias individuales.

Una estructura flotante

Visualmente unido dentro del atrio de 25 metros de altura del Anna-Seiler-Haus, la forma no invasiva de Loops consta de 24 anillos de aluminio de diferentes diámetros que integran una superficie iluminada por LED en sus bordes interiores. Suspendido por dos cables y dirigido por dos cabrestantes motorizados, cada anillo puede moverse horizontal y verticalmente. Es la sincronicidad de los anillos lo que crea la impresión de un movimiento tridimensional que transforma constantemente el espacio.

“Quieres saber constantemente qué viene después…

Y al mismo tiempo también disfrutar de una coreografía calma y meditativa”.

Julia Schankin, Inselspital

Un movimiento infinito

Como los anillos independientes pueden moverse libremente, la estructura permite que diferentes coreografías sucedan al mismo tiempo siguiendo impulsos inesperados predefinidos a lo largo del día para garantizar una amplia variedad de patrones. Durante las primeras horas de la mañana y las últimas horas de la noche los movimientos son más tranquilos, mientras que durante el día las coreografías cobran velocidad. Por la noche, la instalación entra en un tranquilo y plácido modo de espera, permaneciendo en el centro del atrio y sólo enseñando el juego de luces.

Además, cada hora en punto los 24 anillos convergen hacia el centro y, a través de un pulso luminoso, anuncian las horas del día.