El reto
Como agentes mundiales en la industria de bienes raíces trabajando como promotores, constructores y gestores, Losinger Marazzi representa el futuro de la construcción. Nuestro reto fue crear un nuevo hogar para su agencia regional en Lausana, en el distrito Oasis que ellos mismos han construido en la ciudad de Crissier.
El espacio necesitaba reflejar el legado centenario del cliente a la vez que incorporar su “Visión en 2020” centrada en la regeneración urbana, las ciudades inteligentes y una oferta de servicios holísticos. Además, otro reto del proyecto era alinear a diversos grupos de interés, facilitar la colaboración a través de tres plantas de espacio laboral y ofrecer una experiencia acogedora para el personal y colaboradores externos.
El resultado
Creamos un espacio de trabajo que transmite la fortaleza y capacidades de Losinger Marazzi, refuerza su cultura internamente y impulsa la transformación de constructores a co-creadores de entornos construidos. La honestidad de la construcción dentro del espacio refleja sus capacidades frente a posibles clientes y colaboradores; mientras que la cuidadosa distribución de los equipos y los catalizadores de espacio estratégicamente diseñados rompen silos y crean conexiones entre los departamentos que fomentan el pensamiento colaborativo y la interacción.
Al crear una comunidad de empleados embajadores y trabajar estrechamente con representantes de todas las jerarquías, pudimos recoger ideas y hacer un seguimiento de los niveles de satisfacción a lo largo del desarrollo, construcción y finalización del proyecto. Cinco meses después de trasladarse, el 93% de los colaboradores confirmaron que el nuevo espacio de trabajo había impactado positivamente en la productividad, con 89% reconociendo que la experiencia del cliente se había optimizado.
Descubrimiento
Una noble tradición, un futuro innovador
Durante más de 100 años, Losinger Marazzi ha sido un líder en la construcción suiza, y la compañía es responsable de algunos de los edificios más icónicos del país, así como de varias infraestructuras como La Grande Dixence, la mayor presa de gravedad del mundo. Con un enfoque centrado en la innovación y la tecnología BIM (Modelado de Información en Construcción), se han comprometido en nuevos modos de crear ciudades inteligentes, y es por eso por lo que el distrito Oasis se eligió como la nueva ubicación de su agencia regional en Lausana.
Como subsidiaria de Bouygues Group, Losinger Marazzi está presente en toda Suiza y comprende cinco ramas regionales. Las identidades culturales que abarcan estas geografías, y el talento rico y diverso que atraen exigían un espacio capaz de servir a las necesidades de diversos grupos de interés, poner en valor la historia compartida y honrar su posición como líderes del sector.
Creando una comunidad de embajadores
Los altos directivos de Losinger Marazzi deseaban que su implicación en el proyecto se extendiera más allá de su breve aprobación de la propuesta final, y para ellos era crucial incluir las opiniones de su equipo. Desarrollamos una estrecha colaboración entrenando a embajadores de marca, realizando encuestas y fomentando la comunidad online para recoger ideas de los usuarios. Nuestros embajadores no solo ayudaron en la investigación y colaboraron en talleres temáticos, sino que se animaron a realizar sus propios grupos de debate sobre las necesidades específicas de cada departamento. Al convertir a los usuarios reales en “líderes del cambio” pudimos apoyar la transformación cultural de la compañía y reunir datos exhaustivos cualitativa y cuantitativamente.
El beneficio de escuchar primero a los usuarios para recopilar ideas y medir la satisfacción del cliente durante el proceso nos permitió ganar confianza creativa y estrechar lazos. Este enfoque nos garantizó, además, el pleno entendimiento y prioridades de sus necesidades para alcanzar el mejor resultado. Gracias a ello, el 86% de los usuarios consideraron que el nuevo entorno laboral genera un impacto positivo en su bienestar.
Identificando y entendiendo los factores clave
Nuestro proceso de co-diseño fue fundamental a la hora de crear una sólida relación con Losinger Marazzi y lograr un entendimiento compartido de sus necesidades e impactos deseados. A través del benchmarking, de los talleres y la co-creación, nuestro proceso de descubrimiento identificó los factores clave que definirían cada decisión de diseño.
Para nuestro cliente era importante crear una experiencia de bienvenida capaz de fomentar la colaboración y el intercambio de ideas entre visitantes externos, ya sean colaboradores, inversores, subcontratistas u obreros. A esto se sumaba una fuerte necesidad de diseñar espacios versátiles para acomodar diferentes tipos de actividades, con interfaces de comunicación interna más fuertes y una división de áreas más estratégica capaz de fomentar la interacción entre colaboradores de diferentes equipos.
Ideación y diseño
Creando un solo espacio a través de tres plantas
Con el fin de mejorar la conectividad interna entre los equipos distribuidos a lo largo de tres plantas y facilitar el movimiento entre ellos, la circulación se convirtió en una función estratégica importante a la hora de organizar el espacio. Lo logramos con elementos como las dos escaleras panorámicas situadas en el espectacular vestíbulo del edificio; instaladas para que el staff no tuviera que utilizar la escalera compartida con el resto de los vecinos y acceder a cada planta separadamente. Esta atractiva solución fue especialmente bien recibida por los colaboradores, no solo por su originalidad, sino por su éxito a la hora de romper el aislamiento.
Con la recepción ubicada en la planta central para que el movimiento interno fuera más sencillo para los visitantes, los equipos fueron estratégicamente distribuidos para estimular la circulación, la colaboración y la conexión entre departamentos. Además, en cada planta diseñamos diferentes espacios pensados para generar comunicación transversal, activar comunidad, fomentar la colaboración entre proyectos y el intercambio de conocimientos.
Honestidad en la construcción
Como promotores y constructores, el espacio de trabajo de Losinger Marazzi no es solo el lugar que da vida a sus proyectos, sino que es una extensión de sus credenciales y una oportunidad para comunicar eficazmente su fortaleza a los clientes potenciales y co-creadores.
Como la autenticidad tiene tanta importancia en el proceso como el producto final, imaginamos un espacio en donde los elementos de construcción se exponenen. Así, utilizamos materiales de construcción tradicionales pero de un modo innovador, como ladrillos y listones de madera, generando accesorios únicos e interiores capaces de reflejar la honestidad de esta firma y conectar con su identidad y valores. El 93% de los colaboradores están de acuerdo en que este enfoque narrativo ha creado un espacio laboral que refleja su propuesta de valor y las capacidades de la compañía.
Implementación
Catalizando conexiones
Al colocar espacios catalizadores en las tres plantas para reunir diferentes departamentos alrededor de objetivos compartidos, fomentamos la colaboración en el espacio y reforzamos nuestro concepto estratégico de zonificación.
The Project Space (Espacio de proyectos) se caracteriza por la presencia de una cabina de obra real. Este área es ideal para reunir a equipos transversales y centrarse en proyectos colaborativos. Como esto podría incluir colaboradores externos, el área está ubicada en la planta central cerca de la recepción.
The Knowledge Center (Centro de conocimiento) crea un espacio para jefes de obra y obreros estrechen lazos y expandan sus conocimientos. Incluye una sala de aprendizaje al estilo de un encofrado de cemento, un área para prototipos digitales que se complementa con una sala de realidad virtual y MOOC, así como instalaciones para reuniones formales e informales. Las experiencias digitales aúnan a estos grupos para compartir sus conocimientos y conceptualizar proyectos.
Con vistas panorámicas al Lago Ginebra y a los Alpes, la cafetería se ubica en una zona tradicionalmente designada al despacho de los directivos. Este espacio abierto ofrece una zona de trabajo informal alternativo –una decisión estratégica que posteriormente ha recibido una calificación satisfactoria unánime gracias a su diseño multifuncional y propicio para fomentar el desarrollo comunitario. Este espacio catalizador, en conjunto con la sala de relajación y descanso impulsa el bienestar, la interacción interna y la socialización.
Salas de reuniones que facilitan la narrativa y la colaboración
Para ofrecer una experiencia memorable, cada sala de reunión incluye una narrativa que evoca los diferentes oficios relacionados con la construcción. Desde la construcción metálica a la carpintería y desde la fontanería a la iluminación, cada una de las 30 salas de reuniones posee una personalidad única, incluyendo distintos materiales que reflejan el alcance de su saber hacer y honran el talento multidisciplinar de los empleados de Losinger Marazzi. Con distintos niveles de formalidad y tecnología, cada espacio promueve un tipo diferente de interacción y promueve la innovación constante.
En contraposción al carácter de estas salas, las áreas individuales de trabajo se diseñaron intencionadamente para ofrecer espacios tranquilos y neutros. Una paleta de materiales y colores reducida combinada con piezas de mobiliario atemporal propicia la concentración.
Usando el espacio para fomentar el movimiento
Gracias a una zonificación y distribución estratégica de los equipos que tuvo en cuenta el análisis de las ideas sugeridas por los usuarios, no solo ayudamos a fomentar el movimiento, sino también a ofrecer diferentes niveles de formalidad que facilitan la interacción y estimulan formas alternativas de encuentro entre profesiones y departamentos. Nuestra distribución de los departamentos basada en esas ideas recibió una calificación satisfactoria de un 86% por parte de dichos usuarios, que consideraban la disposición del espacio bien adaptada a sus necesidades.
Look & Feel
La construcción como centro de todo
Para homenajear a Losinger Marazzi, instalamos un contenedor de transporte en el centro del espacio diseñado. Otros elementos, como la presentación estéticamente agradable a la vez que poco convencional de los ladrillos expuestos y los listones de madera en las tres plantas, así como las salas de reuniones temáticas, ayudan a reforzar los valores de la compañía.
Esta honestidad constructiva y autenticidad va más alla de la estética: al incorporar elementos de cemento que hablan sobre el trabajo al que se dedican y poniendo a los empleados en contacto diario con diferentes competencias fundamentales de la construcción, estos espacios sirven como recordatorio de las posibilidades ilimitadas que estos materiales pueden contener cuando se encuentran en manos de co-creadores innovadores.
Conclusión
Una colaboración verdadera
Este proyecto demuestra el poder de una verdadera colaboración. La potencia de Losinger Marazzi, combinada con la actitud inconformista de Studio Banana han permitido que cada parte contribuyera con su conocimiento y experiencia exhaustiva para ofrecer un espacio que fortalece el intercambio de conocimiento y refleja su cultura e historia en cada detalle. El éxito de esa colaboración se demuestra en la encuesta de satisfacción realizada después de la ocupación, donde el 93% de los encuestados expresaron su satisfacción general indicando que el nuevo espacio de trabajo reflejaba sus propuestas de valor y las capacidades fundamentales de la compañía.
Estamos especialmente orgullosos de cómo les ayudamos en la transición de ser constructores a co-creadores, demostrando cómo fomentar a los participantes en cada nivel a lo largo de la ideación, el diseño y las etapas de ejecución del proyecto con el fin de crear un espacio transformador.
* Fotografía: Rubén P. Bescos para STUDIO BANANA.